El Darbuka es un instrumento de percusión de origen árabe usado en todo el Medio Oriente, es un tambor muy utilizado en el folclore, el origen de la Darbuka e remonta a la antigua Babilonia, su decoración es de madera forja mosaico , también suele ser llamado TOBALLE especial en palestina deriva dos sonidos principales que forma la base de su técnica, un sonido grave (dum) y el otro agudo (tac),
En Egipto se lo llama tabla ,con una palabra árabe genérica para designar instrumento de percusión además tiene forma de copa, su sonido es muy especial las odalisca baila al ritmo del tambor sus cadera se balancean como campana y una rapidez, al mismo tiempo mueven su vientre al ritmo de los tambores es fascinante.
Lo interesante de los instrumentos de percusión es que cualquiera puede disfrutar de ellos a nada que tenga un poco de ritmo y oído. Como todo, luego hay que profundizar en la técnica, por supuesto, y conocer los diferentes golpes y sonidos de cada instrumento.
Los instrumentos de percusión suelen diferenciar 2 tipos de golpes, los graves y los agudos, además de los redobles. El darbuka se sujeta entre las piernas y se toca con los dedos o con la parte de atrás de la mano y según el ritmo que quieras darle deberás tocar en el centro o en los laterales.
En el darbuka, de origen árabe, esto ocurre de la misma manera, y estos golpes se llaman: dum, tak y tákatak. Su utilización cada vez se extiende más por las zonas occidentales, además es bastante fácil de transportar, si no es muy grande, así que en cualquier lugar y momento puedes sacar tu darbuka y ponerte a tocar. Ahora los hay que ya vienen con su funda, te lo cargas al hombro y listo.
Lo bueno de la darbuka, que también se llama doumbek o tombak (aunque yo antes creía que eran diferentes), es que es un instrumento agradecido por su sonoridad, y porque es ligero en su transporte, algo que es más complicado con los djembés.
Antiguamente las dabukas estaban hechas exclusivamente, lo que es la copa, como si dijéramos, de madera y la zona donde se toca de piel de animal, generalmente de cabra o vaca muy bien curtida. La forma de afinar este tipo de darbukas es calentando la piel y tensándola poco a poco, cuando estaba caliente, hasta darle la entonación que uno quiere pero en las de ahora ya es mucho más fácil hacerlo. Las más modernas están hechas de plástico, la zona de tocar, y la copa de aluminio o algún otro materíal duro y ligero.
En los que están hechos de cuero hay que tener especial cuidado que no se mojen o no cojan humedad ya que la piel se destensaría y podría llegar a romperse.
Además, sustituir un parche rajado o roto, es mucho más fácil, pues dispone de unos tornillos tipo allen que sujetan el parche a la copa.
Qué buenos ratos he pasado con mis amigos tocando el darbuka, hubo un tiempo que entre los amigos del grupo teníamos unas cuantas y nos juntábamos para armar ruido y digo para armar ruido porque aunque parezca lo contrario no es nada fácil hacerla sonar bien ya que los sonidos de la darbuka son muy pero que muy limitados, sólo tiene un tono grave y otro agudo, a partir de ahí todo está en la destreza de cada uno para hacerlo sonar y sacarle los mejores sonidos posibles.
Sin duda, os recomiendo probarlo.
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