Tengo este aparatillo llamado Dymo desde hace varios años, que para los que no lo sepan es simplemente un aparato electrónico que sirve para hacer etiquetas adhesivas y que es de gran utilidad tanto para uso domestico como para uso empresarial, ya que gran parte de los profesionales emplean estos aparatos para infinidad de utilidades.
Dymo pertenece a la empresa Esselte, que es una empresa lider mundial en distribución de material de oficina, con lo cual están super especializados en las necesidades empresariales, y también han querido acercarse al entorno doméstico.
Si necesitas comprar un Dymo más barato, a continuación tienes una selección de las mejores ofertas de hoy:
¿Qué necesitas saber?
Dymo LetraTag
Voy a escribir una opinión sobre una «herramienta» que utilizo a diario en mi trabajo. Se trata de una Dymo LetraTag, que no es ni mas ni menos que una maquinita que hace rótulos para etiquetar.
Con esta máquina se pueden hacer rótilos tanto con letras como con numeritos. Resulta ideal para nombrar cajones, cajas, lo que haga falta. En mi caso siempre la uso para identificar ordenadores mediante números.
Uno de los usos más habituales hoy en día es para la ropa del colegio, pues dispone de cargas de tela, o para los libros así te evitas escribirlo a mano.
Esta Dymo LetraTag se presenta en un plástico tipo blíster. Se trata de un envoltorio termosellado, bastante complicado a la hora de abrir. En su interior se encuentra la máquina, con una carga y con pilas. Por supuesto también un pequeño manual con información acerca de ella.
Su utilización es muy sencillas. Encientes la máquina mediante un botoncito rojo. Tecleas lo que quieres que aparezca por pantalla, si quieres mayúsculas pulsas el Shift, si no, lo vuelves a pulsar. Si quieres poner números hay una tecla abajo, al lado de la barra espaciadora que te permite hacer uso de teclado numérico o del abecedario.
Una vez has tecleado la etiqueta pulsas el botón identificado con el icono de una impresora. Cuando termina de imprimir, empujas ligeramente la cuchilla que está justo al lado de la pantallita y se corta.
Entre sus principales características, destaco las siguientes:
- Me gustó esta porque tiene un gran número de caracteres, símbolos y dibujitos para utilizar.
- Su teclado es un teclado ABC, o sea, que esta ordenado por orden alfabético y no como los teclados de ordenador.
- Posee una buena pantalla LCD que se ve bastante clarita y es ideal para escribir sin errores.
- Puedes imprimir en una o dos lineas, cosa que me parece bastante útil.
- Funciona con cuatro pilas AA (que no vienen incluidas) que según el vendedor me durarán muchísimo tiempo. Me dijo que con un uso normal casero me pueden llegar a durar hasta un año. De todas maneras yo uso pilas recargables así que es como si tuviera batería.
- Trae una pequeña memoria que guarda siempre la última etiqueta.
- No necesita tinta de impresión ni cartuchos de tinta ni toners gracias a su tecnología de impresión de transferencia. Creo que imprime quemando, pero no estoy seguro al cien por cien.
- Imprime en etiquetas de 12 mm que pueden ser de papel, plástico, tela e incluso metálicas según las instrucciones. Yo solo he probado el plástico y va muy bien.
- Tiene 8 estilos y 5 tamaños de letra.
- Tiene también visualización previa de la impresión.
Las etiquetas siempre tienen papel de pegatina, por lo que al retirarlo se enganchan a todos lados donde quieras ponerlo.
Hay recargas de diferentes tipo: de plástico, de papel, de tela…
Las de plástico tienen un precio que ronda los 3. Hay de diferentes colores: rojo, amarillo o azul. Cualquiera de ellos funciona bien y se lee igualmente, por lo que es algo poco importante.
Las de papel son un poquito más económicas, pero también cuestan más de retirar en caso de que quieras quitarle la etiqueta, cosa que en ocasiones puede interesar más, pero por ejemplo en mi caso no, y las utilizamos como precinto.
En el caso de las de tela cabe decir que nunca las he probado y no recuerdo el precio. He visto que varias personas las han empleado y les ha ido de maravilla y están muy contentas, pero no he tenido el gusto de experimentar con ello, por lo que no comentaré mucho más.
Dymo LetraTag Es una máquina que merece la pena tener, pues tarde o temprano se utiliza. Es práctica, pesa poco, ocupa poquísimo espacio, y es más bien económica, pues sale por unos 30 según la oferta del mes sale más o menos cara.
Los consumibles con muy fáciles de encontrar en cualquier tienda tipo papelería, o especializada en máquinas Dymo.
Yo la recomiendo, realmente es algo que va muy bien.
Dymo LabelManager
A la vista de que otros departamentos me pedían el Dymo cada vez con más frecuencia, decidí traspasárselo y comprarme un Dymo nuevo para mi uso y disfrute particular. El único requerimiento que le puse a la empresa que nos sirve el material de oficina era que tuviera un teclado QWERTY. Lo demás me importaba un pito. Lo que me llegó al cabo de unos días es lo que se ve en la foto: un cruce entre calculadora de sobremesa y teléfono con diseño extragaláctico. Impresionante. La gente desfilaba delante de mi mesa sólo para verlo…
Empecemos, pues, por lo más evidente. Aquí los diseñadores se han fajado. Realmente, el aparato llama la atención. La carcasa es en dos colores (azul metalizado para la parte del teclado y plateado para la parte trasera, donde va la maquinaria). El teclado es espacioso y distribuido exactamente como una máquina de escribir.
El display de cristal líquido es amplio y permite escribir en distintas líneas, entre las cuales te desplazas mediante unos cursores. Hay bastantes teclas adicionales para las múltiples funciones y el corte de la cinta se produce automáticamente con sólo pulsar un botón (hay bastantes rotuladoras actuales en las que el corte se produce mecánicamente).
Exteriormente, llama la atención una especie de protuberancia que se encuentra a la derecha en la parte de atrás; allí es donde se alojo el mecanismo que corta la cinta.
La Dymo LabelManager lo hace todo, incluso los modelos de gama media-alta pueden imprimir códigos de barras si se conectan al ordenador.
Para el resto de los mortales basta y se sobra con los modelos de entrada para sacar etiquetas autoadhesivas con todas las pijadas imaginables. Sólo para que os hagáis una idea, enumeraré algunas de las muchas posibilidades que ofrece a la hora de rotular: un montón de tipos de letra (normal, invertida, negrita, cursiva, tachada, 3D, sombreada, etc), varias manera de enmarcar el texto, escribir sobre varias líneas (el aparato admite cassettes con cintas de hasta 19 mm de grosor), añadir un mogollón de símbolos gráficos y monetarios, imprimir copias múltiples, numerar las etiquetas, fijar la longitud en milímetros, almacenar formatos predefinidos o plantillas, etc. Todo esto (y más) se realiza jugando con un buen número de teclas.
El funcionamiento es fácil, pero llegar a dominar este mogollón de opciones requiere un estudio profundo del manual de instrucciones.
Recambios Dymo
Vienen en una carcasa de plástico y se encajan dentro del dymo, y luego queda debajo de la tapita, el dymo tiene una ranura para que vayas mirando cuanta cinta queda más o menos.
Las cintas son de 12mmx4mm y los diferentes colores de la carcasa dependiendo de cual compremos. Todas vienen con 4 metros excepto las metálicas que son 5metros.
Tenemos la siguiente oferta:
- Blanco, este es de papel
- Blanco iron, textil y que se adhiere al tejido con la plancha.
- Blanco perla, plástico
- Super amarillo, plástico
- Rojo cósmico, plástico
- Verde, plástico
- Ultra azul, plástico
- Amarillo fondo sonrisas, plástico
- Azul fondo pies, plástico
- Plata , metalizado
- Verde, metalizado
Las cintas rondan los 5 o 6€ dependiendo del color y duran muchísimo, pero vamos que depende mucho de la papelería donde te las compres, hay algunas que se pasan más que otras.
Sobre la marca Dymo y su evolución
Dymo es una marca, actualmente propiedad del grupo Esselte, de capital norteamericano. Pero UN Dymo es una cosa. A nadie se le ocurriría decir al vecino de mesa: ‘oye, me pasas la rotuladora’. Sea de la marca que sea (suponiendo que haya otras marcas, que lo ignoro) Dymo es sinónimo de rotuladora como Tippex lo es de corrector. Y las demás marcas, que se fastidien. Así es desde que tengo uso de razón burocrática y, tal como van las cosas, lo será por los siglos de los siglos. Amén.
Los primeros Dymo que recuerdo eran manuales (por supuesto) y funcionaban con una especie de margarita. Los caracteres se grababan por presión sobre la cinta. Había que apretar bastante fuerte una palanca para obtener un resultado satisfactorio y cortar la cinta requería un esfuerzo adicional de la muñeca. Como tuvieras que hacer muchos rotulitos de estos acababas con unos calambres de brazo considerables….
Más tarde aparecieron rotuladoras mecánicas, más sofisticadas, con muchas más prestaciones y también más fáciles de utilizar. Una de ellas era la que venía utilizando en la oficina, que funcionaba correctamente pero tenía el gran inconveniente de que el teclado no era QWERTY sino que los caracteres estaban puestos en orden correlativo, como los números de una calculadora, lo que convertía la operación de escribir en una tortura china.
Afortunadamente los tiempos cambian y ahora mismo los Dymo que están disponibles en el mercado cuentan todos con teclado QWERTY y pantalla para visualizar las etiquetas antes de imprimirlas.
¿Merece la pena comprar una etiquetadora Dymo?
Ya lo tengo todo bien ordenadito. Os recomiendo esta rotuladora por su precio y su facilidad de uso, además las etiquetas que hace son de muy buena calidad y los recambios de cinta los puedes encontrar en casi cualquier sitio y esto es muy importante.
Su precio es bastante económico, a mi me ha costado 31 euros con un cartucho de cinta de plástico y con 2 años de garantía. No me parece caro en los tiempos que corren.
Considero que es un buen aparatito que nunca está de mas tener en casa.
Ingeniero de Telecomunicaciones y probador incansable de productos, trato de descubrir lo bueno y lo malo de cada cosa que pruebo. Los textos que encontrarás en esta web han sido escritos por muchas personas contando su experiencia con el producto en cuestión, la web no se responsabiliza de la exactitud, lo actualizado que está su contenido y las opiniones vertidas en los textos.
