Fimo

Hoy vengo dispuesta a hablaros de la arcilla polimérica, más conocida por FIMO (que es la marca más conocida en España).

Muchas veces os habréis preguntado cómo hacer figuras con un material fácil de manipular y que no ensucie, pues ya tenéis la respuesta.

Yo solía usar la clásica plastilina, pero es un material que no resiste demasiado el paso del tiempo y al que había que aplicar tropecientas capas de barniz o similar para evitar su deterioro, pero pronto descubrí el fimo, que además ensucia millones de veces menos y no huele mal.

A continuación tenéis ofertas para haceros con Fimo de forma más económica y del color que queráis:

¿Qué es el Fimo?

El Fimo es una marca muy conocida en España de un material que se denomina arcilla polimérica o plastilina para el horno.

Se trata de un producto de manualidades que sirve para modelado y fabricación de piezas manualmente, aunque también venden multitud de moldes en los que puedes introducir el fimo para hacer figuras.

El Fimo es una pasta de textura similar a la plastilina. Se compone de PVC o policloruro de vinilo. Viene en paquetitos de plástico de distintos pesos (los hay más pequeños o más grandes dependiendo del fin al que vayan destinados).

En el mercado existen diferentes marcas (Sculpey, Cernit, FIMO…), colores (gran gama) y acabados (simulando mármol, fosforitos que brillan en la oscuridad, metalizados, con purpurina, en colores pastel, traslúcidos…). Sea lo que sea que tengas pensado hacer, seguro que encuentras el Fimo adecuado.

Su precio oscila pero a mí me cuesta aproximadamente 1’70 cada pastilla de 56 gramos.

En esta marca encontraremos dos tipos básicos:

  • Fimo Soft : más blandito, adecuado para trabajos de principiante.
  • Fimo Classic : más duro, puede ablandarse con calor, adecuado para trabajos en miniatura o que deban ser más resistentes.

Cómo trabajar con Fimo

Esta pasta, al venir en pequeños bloques (algunos de ellos con marcas para extraer pequeñas barritas) son fáciles de manipular. Tan sólo tienes que cortar con un cutter la cantidad necesaria y comenzar a calentarla y moldearla con las manos.

Yo no estoy muy puesta en lo que se refiere a utensilios para Fimo, la verdad es que uso algunos caseros (tijeras, punzones, cutter, rodillo de cocina, buriles…).

Sé que hay máquinas bastante sofisticadas para prensar el fimo en planchas, hacer «churrillos» (con jeringuillas especiales), moldes y creo que son muy útiles pero sólo si vas a hacer mucha cantidad de objetos, porque son bastante caros.

Como ya he dicho antes, es tan fácilmente manipulable como la plastilina, así que podrás crear cualquier forma, tan sólo es necesario un poco de maña.

Además, podrás mezclar libremente todos los colores y acabados. En ocasiones también se puede mezclar con otros materiales (como papel de plata, alambre…).

Una vez realizada la figura sólo tienes que meterla en el horno a 110ºC/230ºF y dejarla calentar aproximadamente 30 minutos.

Cuando salga del horno estará muy caliente, así que deberás dejarla reposar para que adquiera dureza y se enfrie.

Esta pasta además, tiene la ventaja de que puede ser pintada (con acrílicas o rotuladores) y barnizada una vez endurecida, por lo que podremos hacer manualidades dignas de un gran artista.

Si deseamos unir piezas una vez cocidas, este material también admite pegamentos tipo loctite, así como grabados con punzón, lijados y pulidos.

Si nos sobra algún pedazo de Fimo podemos conservarlo en perfectas condiciones dentro de un flim transparente de cocina.

Precauciones al trabajar con arcilla polimérica

Esta pasta no es tóxica salvo en el proceso de horneado. En este paso no debemos exceder el tiempo indicado en el envase, ya que los vapores que emite SÍ son tóxicos.

Hay que tapar muy bien la pastilla de fimo una vez abierta si no la utilizamos toda. Si no, se seca, se endurece y se resquebraja al igual que la plastilina cuando está mucho tiempo en contacto con el aire.

Seguir las recomendaciones del fabricante al pie de la letra respecto a la cocion en el horno.

  • Si te pasas con los grados, la pasta se quema y se pone de un color oscuro.
  • Si te pasas de tiempo además, al quemarse se infla y pierde la forma que le habíamos dado.
  • Y también otra posibilidad es que si no utilizamos bien el tiempo/temperatura, la figura caiga y se aplaste (como un bizcocho cuando no se hincha).

Para qué usar la arcilla polimérica

Existen tantas aplicaciones como tu cabeza pueda imaginar. Las más comunes:

Figuras, cuentas para collares, pendientes, anillos, bolígrafos, adornos para el pelo, adornos para frascos, colgantes para móviles, aplicaciones para peines, aplicaciones para tapones, señaladores, sujetanotas, ceniceros, botones, broches…

Mi opinión sobre el Fimo

Desde que he descubierto esta pasta estoy encantada y me paso mis horas libres experimentando con ella.
No es que haga cosas muy sofisticadas como los «millefiori», pero de momento me atrevo con figuritas.

Su resultado es fantástico, se puede hacer casi todo lo que te propongas porque es fácil de moldear y de endurecer, incluso para los niños es muy divertido (con la supervisión de un adulto, claro).

Los objetos que hago con ella quedan bastante majos y son resistentes, siempre tengo ganas de probar más cosas. Además su precio es bastante adecuado porque una pastilla puede dar para mucho si sabes cómo usarla.

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