Bowmore es el octavo whisky de malta más vendido en el mundo y sin embargo, y afortunadamente, sigue siendo un producto solo para unos pocos elegidos.
El fascinante mundo del whisky de malta no está haciendo más que florecer en España. Apenas una docena de marcas están en el mercado, aunque en la mente de los consumidores, los productos conocidos se pueden contar con los dedos de una mano.
Si salimos de Cardhu, Knockando (por la fuerza de Diageo), Macallan y poco más, entramos en un mundo absolutamente desconocido para el 95% de los amantes de la buena mesa.
Y sin embargo, nos estamos perdiendo un universo de sensaciones y sabores fascinantes. Me sorprende oir a mucha gente hablar de que no le gusta el whisky -y menos «solo»- cuando no han probado ni un 2% de los whiskies que existen en el mercado.
Y de entre ellos, Bowmore es una de las joyas más codiciadas. Tiene un blended muy acertado (60% bourbon, 40% jerez), con un proceso de envejecido cuidado al detalle (en la web tienen una cámara de sus depósitos ubicados bajo el nivel del mar, junto al eterno batir de las olas del Atlántico, en la destilería de Islay) y su packacing ha ganado varios premios internacionales de diseño.
Además, como destilería estamos hablando de la destilería de whisky más premiada del mundo en los últimos 10 años, destacando la amplia gama de premios otorgados en el San Francisco World Sprit Competition.
Y sin embargo, lo que me enamora de Bowmore no es nada de esto. Nada describe la sensación de servirme una copa de balón con mucho hielo (preferiblemente picado o microhielos) al volver del trabajo, sentarme en mi sillón, bajar la luz, y disfrutar de cada sorbo, recrearme con el olor a turba que me recuerda mi mar añorado, paladear su textura untuosa…
Lo siento, pero soy absolutamente imparcial. Estoy totalmente encantado con Bowmore…
Ingeniero de Telecomunicaciones y probador incansable de productos, trato de descubrir lo bueno y lo malo de cada cosa que pruebo. Los textos que encontrarás en esta web han sido escritos por muchas personas contando su experiencia con el producto en cuestión, la web no se responsabiliza de la exactitud, lo actualizado que está su contenido y las opiniones vertidas en los textos.